El sector audiovisual cuenta con una iconografía muy simbólica que se repite en innumerables imágenes. Es un reto crear una identidad que incorpore elementos reconocibles que transmitan la actividad, al tiempo que creamos una imagen auténtica, reconocible y atractiva.
El símbolo ofrece un juego interesante al observarlo de forma vertical, mostrándonos una forma humana.
Encontramos aquí el carácter social que está detrás de la labor de REMOTO: grabar y transmitir a las personas y sus actividades.
Otro juego interesante que podemos extraer, es el que esconde la palabra RETO si sólo leemos las letras que quedan en imagen.